miércoles, 8 de marzo de 2017

EL FEUDALISMO



Organización social, política y económica basada en el feudo que predominó en la Europa occidental entre los siglos IX y XV. Se trataba de propiedades de terrenos cultivados principalmente por siervos, parte de cuya producción debía ser entregada en concepto de "censo" (arriendo) al amo de las tierras, en la mayoría de los casos un pequeño noble (señor) nominalmente leal a un rey.
Antecedentes:
El sistema feudal europeo tiene sus antecedentes en el siglo V, al caer el imperio romano. El colapso del Imperio acaeció básicamente por su extensión y la incapacidad del emperador para controlar todas sus provincias, sumado a las cada vez más numerosas incursiones de pueblos bárbaros que atacaban y saqueaban las provincias más retiradas del imperio. Esto provocó que los emperadores necesitaran gente para defender sus grandes terrenos y contrataran caballeros o nobles (precursores del modelo de señor feudal), éstos contrataran vasallos, villanos, etc... Se llegó incluso a contratar a jefes y tropas mercenarias de los mismos pueblos "bárbaros".
A partir del siglo X no queda resto de imperio alguno sobre Europa. La realeza, sin desaparecer, ha perdido todo el poder real y efectivo, y sólo conserva una autoridad sobrenatural remarcada por las leyendas que le atribuyen carácter religioso o de intermediación entre lo divino y lo humano. Así, el rey no gobierna, sino que su autoridad viene, a los ojos del pueblo, de Dios, y es materializado e implementado a través de los pactos de vasallaje con los grandes señores, aunque en realidad son éstos quienes eligen y deponen dinastías y personas.



1.- Durante el periodo feudal la economía era autárquica, es decir, se producía sólo lo necesario para el consumo del feudo.
2.- La base de la riqueza la constituía la propiedad de la tierra ya que era más rico quien tuviera mayor extensión de tierras y la base de la producción era la agricultura.
3.- Como no se producía excedente no existía el comercio. Los emisarios del señor feudal recogían los impuestos en especie y le dejaban a los campesinos escasamente los productos necesarios para sobrevivir.
4.- Como consecuencia de la inexistencia del comercio no existía circulación monetaria entre feudo y feudo.



La sociedad feudal estaba constituida por tres clases absolutamente distintas en sus obligaciones y en sus obligaciones y en sus costumbres: los nobles, los clérigos y los campesinos o villanos.
Los nobles tenían a su cargo las tareas guerreras; los clérigos, lo concerniente a la vida religiosa; los villanos, la labranza y las faenas manuales.
La nobleza y el clero disfrutaban de grandes privilegios y monopolizaban la propiedad de la tierra. La nobleza basaba, además, su poderío, en la fuerza militar; el clero, en su prestigio religioso y cultural.
Los villanos, en cambio, ocupaban un rango social inferior y sus obligaciones eran mucho más numerosas que sus derechos; trabajaban los grandes dominios señoriales, y en retribución de esa tierra que se les cedía para su trabajo y de la protección que se les dispensaba, debían múltiples servicios y prestaciones a sus señores.
Los villanos, (habitantes de la villa), eran todos los campesinos, pero estaban divididos en libres y siervos. Los campesinos libres podían abandonar las tierras que trabajaban y buscar hogar y protección en otro señorío, cuando así lo desearan. En cambio los siervos carecían en absoluto de libertad y no podían abandonar la gleba (tierra o heredad) en que trabajaban. Con todo, libres y siervos, los villanos no podían ser privados de sus tierras mientras cumplieran fielmente las prestaciones debidas a sus señores. Los villanos debían pagar al señor ciertos tributos, estos eran dos clases, en especie y en trabajo.
La Nobleza Feudal:
Todo poseedor de un feudo era noble, pero la mayor o menor importancia de los feudos contribuyó a establecer diversos grados en la nobleza. Los más encumbrados eran los duques, condes y marqueses, poderosos señores que sólo rendían homenaje a los reyes y de quienes dependían numerosos vasallos.
De menor jerarquía, eran los llamados en Francia barones, y en España ricos-hombres, quienes a su vez recibían el homenaje de señores de inferior categoría, poseedores de feudos más pequeños. Estos últimos constituían la pequeña nobleza y eran llamados castellanos, hidalgos o caballeros. (Como los nobles combatían a caballo, el término caballero se convirtió más adelante en sinónimo de noble.)
El Castillo:
Los primeros castillos surgieron en la época de las invasiones de los siglos IX y X. En un principio fueron sencillos edificios de madera, rodeados por una sólida empalizada de estacas. A comienzos del siglo XII, la piedra sustituyó a la madera debido a los pesados proyectiles lanzados por las catapultas, nueva arma introducida en occidente a raíz de las Cruzadas. Los castillos se construían en colinas o lugares desde los cuales la defensa era más fácil.
La Caballería:
Las guerras entre señores feudales eran muy frecuentes, pues estos no reconocían más ley que la de la fuerza para resolver sus problemas. Las guerras señoriales causaron tremendo daño y fueron uno de los más graves males del régimen feudal. La Iglesia moderó y corrigió la rudeza de las costumbres señoriales con dos instituciones:
La tregua de Dios y la caballería.
La tregua de Dios prohibía bajo pena de excomunión guerrear en los días jueves, viernes, sábado y domingo, así como también en la fecha de las grandes festividades religiosas. También se declaraban especialmente protegidos por la Iglesia a las mujeres y a los niños. La tregua contribuyó poderosamente a humanizar las costumbres. Los jóvenes nobles recibían una educación esencialmente militar. A partir del siglo XI la Iglesia agregó a ese aprendizaje militar una preparación de orden espiritual. Esta intervención de la Iglesia engendró la institución de la caballería. Para ser reconocido caballero, el noble debía comprometerse a respetar la fe empeñada, combatir las injusticias, proteger a los débiles.
Costumbres:
La vida del Señor: La caza constituía el placer favorito de aquellos hombres rudos e ignorantes, acostumbrados al manejo de las armas y a la vida activa al aire libre. La otra diversión era los torneos, justas de armas que suscitaban en los protagonistas y en los espectadores todas las emociones de la guerra. Los caballeros que intervenían en ellos combatían en duelo singular o en grupos, a caballo y utilizando la lanza y la espada.
 La Influencia de la Iglesia:
La Iglesia Católica fue el más poderoso pilar de la sociedad en la época feudal. Tuvo una injerencia ilimitada en todos los órdenes de la vida.
- La unidad y la universalidad de la fe, que caracterizaron la vida medieval. Ninguna religión disputó, en efecto, al catolicismo durante la edad media el gobierno de las almas en la Europa de occidente.
- El predominio cultural del clero. Este constituyó en la edad media la única clase letrada. Ser laico era estar al margen del saber. Las escuelas fueron, además anexos de las catedrales y de los monasterios y en ellas oficiaban de maestros los sacerdotes y los monjes que impartían gratuitamente los sencillos conocimientos de lecturaescritura, doctrina cristiana y canto. El monopolio cultural del clero y la eficacia de su actividad docente arraigaron, sólidamente, su autoridad y su prestigio.
La Iglesia procuro hacer del catolicismo el eje de la vida espiritual en la edad media. Para imponer obediencia a sus mandamientos disponía de dos armas poderosas, la excomunión y la interdicción.
Toda la autoridad de la iglesia no impidió, sin embargo, el surgimiento de herejías, o sea, disidencias de opinión con respecto a los dogmas católicos.
Formación: sistema político, social y económico q se formó en Europa luego del imperio carolingio. Este sistema se basa en las relaciones personales entre el señor feudal y su vasallo.

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